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- A llegado la, tan esperada, primavera y con ella el cansancio, la falta de energía tanto física como mental que reduce, incluso, la capacidad de realizar actividades cotidianas, la llamada Astenia primaveral.
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Curiosamente, no aparece después de grandes esfuerzos, ya que pueden ser suficientes pequeñas rutinas físicas para que la sintamos.
Algunos de los síntomas que se pueden manifestar son: irritación, tensión baja, cansancio, somnolencia….
Es más frecuente en las mujeres que en los hombres.
La o las causas que la provocan, no son bien conocidas. Se cree que es debida a los cambios meteorológicos que la primavera conlleva: cambios bruscos de temperatura, de presión, cambio de hora legal…es pues un proceso de adaptación de organismo.
[fancy_header variation=”teal”]Recomendaciones[/fancy_header]
Para curar la astenia primaveral, no es necesario ningún tratamiento ya que remite en pocos días o semanas, pero si es posible hacer algunas recomendaciones para disminuir la sintomatología y que esta sea lo más breve posible: [fancy_list style=”arrow_list” variation=”teal”]
- Dormir las horas necesarias para tener un buen descanso. En general, 8 son las aconsejables. Tener un horario fijo para acostarse y levantarse. Una breve siesta, si es posible, ayuda a recuperar fuerzas.
- Hacer ejercicio de forma regular, apropiado para nuestra forma física y de acuerdo a nuestro entrenamiento y, si es posible, al aire libre. Si no lo hacemos habitualmente, será suficiente para empezar, andar una media hora al día, y poco a poco ir aumentando.
- Intentar tener una actitud positiva ante las situaciones cotidianas. Nos ayudará a estar mejor con nosotros mismos y “con el mundo”.
- Evitar el tabaco. Disminuye la cantidad de oxigeno que llega a nuestros tejidos y con ello, aumentará nuestro cansancio.
- La alimentación, como siempre, es muy importante:
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- Mantener un horario regular de comidas.
- Evitar las comidas pesadas y la comida rápida.
- Consumir 5 raciones de fruta y verdura de temporada
- Disminuir el consumo de grasas, usando aceite de oliva para cocinar.
- Evitar el consumo de alcohol
- Evitar, o limitar, el consumo de bebidas estimulante (café, té…)
- Mantener una buena hidratación. Con el aumento de temperatura, aumenta el sudor y, por lo tanto, la perdida de agua. De 1,5 a 2 l de agua al día es lo aconsejable…
Por tanto la astenia primaveral, es solo un periodo de adaptación, de nuestro organismo, a la nueva situación climática, que no precisa de tratamiento y que desaparece, de forma espontanea, en pocos días o semanas y solo deberemos acudir a nuestro médico, si esto no sucede así, es decir si los síntomas se mantienen por un periodo mayor de tiempo.